14/11/10

Mercedes Álvarez. Historia de un ladrón
















La crítica del periódico Público abre, al menos para mí, un campo de visión nuevo en el libro de Mercedes Álvarez. Un breve estudio comparado de la ausencia de la madre da una idea muy distinta de esta novela corta de carretera. Siempre detrás, sostenida, como un bajo continuo, la madre, la esposa, la presencia femenina acompaña a los dos viajeros hacia el sur.

"No creo –dice Mercedes Álvarez- que las relaciones entre madres e hijos necesiten romperse en la literatura, pero es cierto que hasta la figura de la madre más dura y terrible de todas hace grande a una novela. De hecho, la ausencia de una madre es un relato en sí mismo".

La escritura es dura y delgada. Nada sobra. Los paisajes están descritos con una economía de medios muy eficaz y los personajes imponen. Construidos casi con nada, con acciones mucho más que con reflexiones, avanzan hacia el final de la novela con una decisión absoluta.

Cambié un par de correos con el editor hace unos días. Le expresé mi deseo de que el libro se vendiera bien. Lo que me interesa –me dijo más o menos- es publicar buena literatura.

2 comentarios:

  1. Anónimo20/11/10

    Mil gracias, Miguel. Esta novela te debe mucho más de lo vos creés.

    Besos,

    Mercedes

    ResponderEliminar
  2. Gracias a ti, Mercedes.

    ResponderEliminar