28/12/09

Sillas y chispazos III


El público. Un flujo que puede medirse con un contador. ¿De dónde es usted? O mejor ¿De qué Comunidad? Un caudal veraniego con mayor o menor interés que se tropieza con una silla cuyas patas terminan en las puntas afiladas de cuchillos apoyados contra el suelo y como no hay un cuidador cerca y sobre todas las cosas está el derecho soberano del consumidor, el público se sienta en la silla hasta que ceden las hojas y para cuando llega el vigilante ya están dobladas por completo y la escultura arruinada. Y el vigilante que pide al espectador que se levante de la silla, recibe la contestación que ya todos llevamos impresa como un circuito. Yo he pagado una entrada y me siento donde quiero.

2 comentarios:

  1. Y eso entre la gente que va a exposiciones, a la que se le presupone un poquito más de cultura. Porque la respuesta verdaderamente estándar sería un "que se joda".

    En su momento me hizo gracia encontrarme con esto:
    http://picasaweb.google.es/Luistarrafeta/2008_07_24?authkey=Gv1sRgCLuspLyS2PqjGw#5227138965265473682

    Pero en ningún momento dudé de que el cartelito era útil e, incluso, necesario.

    "Ceci n'est pas un chaise".

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  2. Como en el jazz los estándares son muy socorridos. Se oyen o adividan con frecuencia.

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