23/10/07

Más móviles en malas condiciones




Foto Chris Jordan

5 comentarios:

  1. Anónimo23/10/07

    "Conversamos agradablemente durante el trayecto, y el señor S. me proporcionó algunos datos relacionados con mi profesión. Dijo que era la más distinguida del mundo, y que no debía confundirse, bajo ningún concepto, con la de abogado; pues era totalmente diferente, infinitamente más selecta, menos mecánica y más lucrativa. En los tribunales nos tomábamos las cosas con mucha más filosofía que en cualquier otra parte, señaló, lo que nos convertía en una clase privilegiada, separada del resto. Añadió que era imposible negar el hecho, bastante desagradable, de que eran sobre todo los abogados quienes nos daban trabajo; pero me dio a entender que se trataba de una raza inferior de hombres, universalmente menospreciados por todos los procuradores que se preciaran de serlo."

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  2. Fotografia fantástica!

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  3. Estimado sr. Vidal:

    Las reflexiones del sr. S. parecen escritas entre los años veinte y cuarenta del siglo pasado. Hoy en día y salvo una de sus afirmaciones, nada de lo que señala funciona así. Por lo general es exactamente al contrario.


    Ignoro el motivo por el que omite ud. el autor. Tal y como ud. espera, le quedaré agradecido si me facilita el nombre del mismo a fin de obtener una idea del contexto. puede hacerlo a través de esta misma página o bien mediante e-mail a mi dirección.

    Reciba un atento saludo.

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  4. Anónimo25/10/07

    Si por siglo pasado entendemos el siglo XIX, está usted en lo cierto. Si por S. entendemos el señor Spenlow, también. Ítem más si por tribunales entendemos los Commons londinenses. Me gustaría darle más pistas, pero creo que con estas será suficiente.
    Por lo demás, y al margen de la anécdota profesional del protagonista, coincidirá conmigo en que la novela es maravillosa.

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  5. Estimado sr. Vidal

    Lamentablemente, no puedo coincidir con usted. Nunca leí "David Copperfield". De momento,Dickens me interesa poco.
    En cuanto a la traducción de solicitor por procurador es la única posible, aunque las funciones no son exactamente las mismas.

    La falta de contexto, así como la sustitución del nombre del sr. Spenlow por su inicial, me hicieron pensar en la época posterior a la suspresión de las oposiciones en España para acceder al título de procurador. En aquellos tiempos, todavía el cliente buscaba la recomendación del procurador en cuanto al abogado adecuado para un caso concreto.

    En el sistema británico tales relaciones se explican muy bien en "Testigo de cargo", de Billy Wilder.

    Nunca me canso de ver a Charles Laughton manejando la palanca del ascensor acoplado a la escalera que conecta su domicilio con su despacho.

    Estuvo bien el anzuelo.

    Buenas noches.

    P.d. Resulta, de todas formas, interesante comprobar el número de veces que se cita la profesión (35) y la forma en la que se hace en la novela.

    http://www.elaleph.com/libros.cfm?item=378665&style=biblioteca

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