López y White

Hay una fotografía de Nicolás López que deber ser del 99 o algo así. Antes del 11-S. Es un montaje difuso, un tanto onírico, en el que un avión vuela hacia las Torres Gemelas. La vi en su estudio hace ya tiempo. Era una especie de pre-visión. Hay casos conocidos como el de la escena de Spiderman entre las dos torres y muchos otros que deben formar una lista interminable. No se puede hablar -ya se ha dicho- de profecías o cosas por el estilo, pero siempre queda ese regusto de la precognición, que posiblemente no existe. Todo puede ser un deja vu. De hecho, el Empire State Building sufrió en su día el impacto de un aeroplano.

Leo Esto es Nueva York de E.B. White, un artículo largo publicado ahora en la editorial Minúscula. La obra vio la luz por primera vez en 1949. Reproduzco a continuación uno de sus últimos párrafos; me causa la misma sensación que la fotografía de López. Algo más, tal vez, teniendo en cuenta el tiempo transcurrido desde la redacción del texto.

"El cambio más sutil que ha experimentado Nueva York es algo de lo que la gente no habla demasiado pero que está en la imaginación de todos. La ciudad, por vez primera en su larga histo­ria, se ha vuelto vulnerable. Una escuadrilla de aviones (poco mayor que una bandada de gansos ) podría poner fin rápidamente a esta isla de fantasía, quemar las torres, derribar los puentes, convertir los túneles del metro en recintos mortales e incinerar a millones. La intimidad con la muerte forma ahora parte de Nueva York: está en el sonido de los reactores en el cielo y en los negros titulares de la última edición.

Todos los habitantes de las ciudades deben convivir con la testaruda evidencia de la aniquilación; en Nueva York dicha evidencia se concentra aún más, debido a la propia concentración de la ciudad y porque, de entre todos los blancos, Nueva York tiene una prioridad firme y clara. Nueva York debe de ejercer un atractivo irresistible sobre la imaginación de cualquier soñador perturbado que desee desatar la tormenta."