3/4/05

Abrirse al mundo

En la biblioteca de la Sorbona veo a más de un estudiante con una nuez junto a los libros con los que está trabajando. Son nueces de metal, despojadas de su cáscara. La mayoría parecen de bronce o de algún material menos noble, pero las hay de plata y no estoy seguro de si una de ellas es de oro. Llevo viendo esto desde hace ya algún tiempo y finalmente me decido a preguntar. Se trata, al parecer, de un regalo que los padres hacen a los hijos que comienzan una carrera. Por su parecido con el cerebro humano, el fruto limpio y entero debería significar la apertura al mundo del conocimiento. No hay una industria de esto. Todas las nueces son distintas. Los padres llevan a fundir el fruto en el metal que estiman oportuno o que pueden permitirse y lo regalan al estudiante al comienzo del primer curso. Algunos me han dejado fotografiarlas. No creo que en las bibliotecas del extraradio vaya a encontrarme con nueces de plástico o algo por el estilo.

1 comentario:

  1. Anónimo4/4/05

    Procurare no importunarte más, supongo que ha sido por el nombre si no me equivoco. Aunque si fuera otra cosa dimelo.

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