A P.C. le fascinan las historias. Mientras tomamos una cerveza me cuenta cómo le ha hecho relatar a su hermana todos los pormenores de un incidente que para él tiene una enorme importancia. Un asunto de familia. No me dice que tenga intención de escribirlo, pero es como si lo dijera. para P.C. no hay literatura sin historia que contar y posiblemente tenga razón; aunque la búsqueda de lo contrario sea la tarea más ambiciosa que pueda emprender un escritor.
Saroyan escribió muchas no-historias. Por ejemplo: La terecerca historia no la escribiré por que no es una historia que pueda escribirse: esta mañana, desde mi ventana, he visto a la anciana que camina encorvada con la vista en el suelo, paseaba y respiraba a la luz del sol, vestida de negro, como siempre, la denominación científica es ataxia de Friedrich y ella caminaba a la luz del sol y yo enseguida he sabido que esa historia no podía escribirla y me he dicho: "Sólo diré esto. Que la anciana estaba a la luz de la mañana..."
Tres historias
William Saroyan
Buscar la inacción en la literatura o en cualquier otra forma de representación tiene sus riesgos. cualquier manual para cuentistas aconseja lo contrario: procure que sus personajes hagan cualquier cosa mientras piensan o hablan. De acuerdo. No es fácil contar lo que no sucede. Pero aunque sea difícil, no es imposible.
Me ha gustado mucho, creo que aquí podré seguir aprendiendo de tí.
ResponderEliminarY no creo estar equivocandome de persona. ¿Te parece bien si te pongo un enlace o prefieres que no? Mi sitio carece de tu profesionalidad pero ahí está. ¡Saludos!