Elegir

Se trata entonces de saber por qué elegimos una prótesis y no otra. De entre los doce comensales, sólo dos viajan sin máquina de fotos. Todos los demás han decido recordar a través de un ojo de cristal determinado. Vale a veces la excusa del desconocimiento, pero hay muchas elecciones que tienen un motivo: el usuario del objetivo de 28 mmm, dificilmente soporta la imagen aplanada del 210 mm. y viceversa. Las pocas personas que usan las cámaras de 6X6 reniegan del formato apaisado del paso universal. En algún momento se crea un deseo de ver el mundo tal y como lo concebimos. Y así modificamos la realidad hasta hacerla cercana a nosotros: manipulada y tolerable. La elección de la imagen, lo mismo que la del recuerdo, no es más que eso: una recomposición del mundo a través de la lente que nos conviene.

El hombre de la Olympus dice algo acerca del espejo convexo del Matrimonio Arnolfini. La sobremesa se alarga un poco más hablando de estas cosas. Somos los últimos en el restaurante y desde la barra, el dueño nos mira con mala cara mientras seca unas copas enérgicamente. Aún queda rato para tomar el metro camino del aeropuerto, así que pedimos otra ronda para evitar miradas de disgusto y para hacer tiempo.