Dosis exactas

Domingo de Resurrección. Acompaño a A.I. en el minibús turístico. Veinte alemanes. Me siento en la fila de atrás.

-Si miran a la izquierda podrán ver tal y tal.

Supongo que debe estar diciendo algo así porque los veinte miran hacia la izquierda. Tiene estilo hasta para apoyarse en la barra de seguridad de la puerta. A las doce abandonamos al grupo a su suerte y nos vamos al Tabac del Bir Hakeim a tomar un martini enano.

-Odio los dispensadores de licor. Dice mientras agita el vaso. -¿Qué es esto? ¿Cinco mililitros?

Llega R.T. con una bolsa de Samaritaine debajo del brazo. Pide un Ricard y se sienta a la mesa. De la bolsa de plástico saca con aire triunfal uno de los cuadros más raros que he visto en mi vida.